El búlder puede practicarse en una pared artificial o al aire libre. Es un deporte de escalada un poco diferente del tradicional. No se trata de escalar en equipo, donde un escalador asegura al otro. Si escalamos en una pared artificial, no necesitaremos cuerdas. Se necesita un equipo realmente modesto para escalar en una pared artificial.
– Pantalones cortos-los pantalones largos dificultarían innecesariamente los movimientos en la pared.
– Botas de escalada-si sólo quieres probar este deporte y aún no quieres invertir en ello, seguro que en la pared te prestan botas.
– Bolsa con magnesio-te frotas las manos con ella para que no resbalen.
Escalar en una pared artificial tiene una gran ventaja sobre la pared real. Con una pared artificial, caes en colchones. Sin duda es más cómodo que caer en las ortigas o sobre una roca. Si decides escalar al aire libre, es una buena idea llevar una colchoneta de búlder. Se trata de una colchoneta de impacto que se puede plegar. Otro artilugio es un cepillo de dientes. No es que un escalador necesite practicar la higiene bucal de vez en cuando. Necesitará el cepillo de dientes para limpiar el magnesio de sus presas.
Un deporte sólo para brazos fuertes.
Los escaladores que se han aficionado al búlder tienen una jerga bastante interesante. Utilizan nombres que pueden confundir al profano. Y a veces hasta se puede pensar algo un poco descarado.
o Magnesio-no es nada asqueroso, pero es un magnesio común que se usa en las manos.
o Tener las manos hinchadas-al escalar, las manos están muy estresadas y a veces ocurre que los antebrazos se hinchan.
o Sacudirlas-se supone que el escalador debe sacudir sus manos para prevenir la hinchazón.
o Pasamanos-como cualquiera puede pensar lógicamente, este es un lugar donde puedes conseguir un buen agarre. Es un gran asidero en el que se puede «golpear».
Uno de los campeones del alpinismo es el Sr. Radek Jaroš, que incluso entró en el Libro Guinness de los Récords. Consiguió escalar el edificio checo más alto, el hotel Corinthia Towers de Praga.
